Rafael Paz y Domingo Contreras asumen compromiso por el Drenaje Pluvial de la capital

El candidato a diputado por la circunscripción 1, del Distrito Nacional, Rafael Paz y el candidato a la alcaldía de la capital, Domingo Contreras, asumieron juntos compromisos para resolver el problema del drenaje pluvial en la capital y mejorar la calidad de vida de los capitaleños.

En una conversación protagonizada por ambos candidatos, en un podcast lanzado por la campaña de Paz, destacaron que el drenaje pluvial, la seguridad en la ciudad, el tránsito y la movilidad, son tres grandes temas que necesitan especial atención de la gobernanza de la ciudad.

De su lado, Domingo Contreras, se refirió a que unos de los grandes obstáculos que se tienen en cuanto al manejo integral del drenaje de la ciudad, es la aplicación de los recursos que están sujetos a una antigua legislación anterior del impuesto a la propiedad inmobiliaria.

¨Nosotros necesitamos usar esos recursos para poder tener un plan continuo, porque comienza con el drenaje pluvial, pero trata de la organización del subsuelo, ya que es una gran metrópolis y tiene un grupo de operaciones en el subsuelo¨, indicó.

Además, el candidato alcalde dijo que en cuanto al tema del tránsito, es importante ordenar el uso de motores, la seguridad de usuarios del transporte colectivo, un cuerpo de seguridad para los que usan dicho transporte, además de aceras apropiadas e iluminación para peatones.

¨Para todos esos proyectos de inversión se requieren recursos, pero también todo un mecanismo de continuidad y de capacidad técnica¨.

Ambos candidatos hablaron del calor que se siente en la ciudad de Santo Domingo, debido a la gran contaminación del aire y los pocos árboles que quedan en la ciudad.

Paz, secretario general de Fuerza el Pueblo en la capital, comentó que la siembra de uno o dos millones de árboles, sería la solución a este tema porque además de reducir el calor de la ciudad aumentaría la calidad del aire contaminado por los vehículos e industrias.

En el diálogo los candidatos concluyeron que ambos tienen la seguridad de que la gestión de Domingo Contreras, será de grandes resultados para los capitaleños.

LEY DEL DNI Y LA MUERTE DE LA LIBERTAD

La Ley 1-24 sobre el DNI es el mayor atentado contra la libertad individual y el derecho a la privacidad cometido en la historia democrática del país. Una ley de un talante autoritario propio de épocas que pensábamos superadas, que desdibuja en una sola pieza el sustrato esencial de nuestra democracia. Es una ley oscura, aprobada con procedimientos dudosos y contrarios a la transparencia legislativa, que merece el repudio nacional, tal como lo han expresado importantes actores sociales, de la comunicación y políticos. Otorgarle a un órgano de investigación, en este caso el DNI, la libertad para reducir derechos constitucionales sin tutela judicial y sin transparencia ante el congreso, equivale a dejar sin efecto las garantías constitucionales y la vigencia del Estado Social y de Derecho proclamados por nuestra Constitución. Todo esto tomando como excusa el concepto de seguridad nacional. A partir de la vigencia de esta pieza la República Dominicana se convierte en un estado policial donde la autoridad no tiene límites, ni políticos ni jurídicos para espiar, interrogar y atosigar a todo aquel que sea considerado un peligro público al sólo criterio de aquellos que detenten el poder. Ante este desatino se impone la necesidad de acción política y ciudadana para dejar sin efecto ese desatino. El camino de la manifestación y la movilización cívica es irrenunciable. Recurrir al Tribunal Constitucional la vía más expedita. Lo penoso es que la mayoría mecánica oficialista que la impuso, no ceja en su afán de justificación a la aprobación de este soberano desatino. Lucharemos

CONTRA OMAR

Hace algunas semanas escribí un artículo titulado: La Mala Política. El mismo contenía una reflexión que exponía nuestras preocupaciones sobre los vicios de la política tradicional que debían ser superados. He observado con estupor el macabro intento, con fines eminentemente electorales, de descomponer y destruir la imagen de mi compañero y candidato a Senador @OmarLFernandez. En nuestro país algunos actores políticos han querido conducir el debate político al extremo de la degeneración. A través de las redes y plataformas digitales han escogido el camino de la descalificación, el insulto, el vituperio y la detractación como forma de participación política. Algunos esconden sus caras detrás de bots, otros simulan la condición de periodistas y otros simulan, nuevamente, ser candidatos. De esos tres grupos los más reales, por contradictorio que parezca, son los bots.

Toda esa claque forma parte de una estructura diseñada para el acoso y derribo de oponentes, y forman parte de comisiones estratégicas creadas para hacer contracampaña y campaña sucia. Son organizados y sistemáticos en el ataque. El objetivo es revertir el avance inexpugnable de la oposición en la capital y así evitar el duro golpe de una derrota en la plaza política más simbólica del país. Su fin nada tiene que ver con una causa patriótica o con la construcción de una visión colectiva que nos permita avanzar como sociedad. Su acción no está sustentada en realidades, sino en mitos. Distorsionan la historia personal del contrincante y, superando a la mafia, utilizan a la familia como objeto de ataque. Para ellos nada es sagrado. Utilizan la desconfianza y desorientación propias de la post verdad para urdir planes horribles con el único fin de “elevar la tasa de rechazo del adversario”. Estos agitadores, se han hecho adictos a los linchamientos digitales, al uso de falsedades y a la distorsión de hechos e imágenes. Han moldeado su perfil político al rol de verdugos digitales cuyo único fin es decapitar moralmente al adversario. Muchos responden a un amo que sostiene su cadena, otros son mercenarios que cambian de piel conforme lo hagan los viento$.

Desde la campaña pasada, los sectores más oscuros del oficialismo le han dado rienda suelta a estos operadores. En aquella ocasión aprovecharon el sentimiento de irritación colectiva a partir de la suspensión de las elecciones. Ese ambiente hizo que mucha gente entendiera justificada esa forma de hacer política. Replicando el estilo de los Hutus en Rwanda, a todo adversario le llamaban rata, ladrón y en el mejor de los casos payaso.

Advertí a Omar de este “modus operandi” y de la actitud que asumirían con él estos personeros una vez asumiera la segunda candidatura más relevante políticamente del proceso electoral. Lo viví en carne viva con 35 años en 2020. Conmigo llegaron al límite de publicar un pasquín disfrazado de una carta sin firma de una inexistente ex novia para intentar aniquilarme moralmente y utilizar la imagen de mi hijo David para una difamación asquerosa. Pero aquella coyuntura y esta son muy distintas. El posicionamiento electoral de la oposición y su candidato en el DN los llevó desesperadamente a lanzar esta aberranción a 5 meses de las elecciones. Gracias a Dios el sentimiento de indignación colectiva pulverizó en el acto su intento. Nada me sorprende, advertí que esta sería la madre de las batallas electorales. Según la información que recibí esto es a penas la punta del iceberg. Vienen con mayores infamias. En el DN todo indica que la lucha será entre dos polos: el del resentimiento, la arrogancia y el odio; y el de la buena política, la humildad y el amor. Nosotros representamos este ultimo. Omar no esta sólo. Prepárense ¡Los venceremos!